La lasaña es uno de esos platos que puede ser altamente calórico (especialmente poco saludable si lo compramos precocinado). Te proponemos una alternativa más saludable. Para ello nos aprovechamos de los vegetales para recrear tanto una especial «salsa bechamel» como las láminas de pasta.
Ingredientes:
Una berenjena grande
Una batata grande
Salsa boloñesa
Queso para gratinar
Leche
Aceite
Pimienta
Nuez moscada
Elaboración:
Lo primero que realizaremos es una salsa boloñesa con la carne que te apetezca (puedes sustituirla por tofu, tempe o seitán para una versión vegana). Pochamos en una sartén este ingrediente picado con cebolla, zanahoria y una taza de nuestra salsa rápida de tomate.
Ponemos a cocer la batata pelada. Mientras se guisa, cortamos la berenjena en láminas muy finas. Podemos ayudarnos de una mandolina o un cuchillo muy afilado. Tostamos las láminas ligeramente en una sartén muy caliente con cuidado de no quemarlas.
Pasamos la batata por la batidora y añadimos leche entera fresca, nuez moscada y pimienta molida para obtener una crema similar a la bechamel.
En un recipiente para horno montamos la lasaña en capas, empezamos por la berenjena y vamos alternando con la boloñesa y capas finas de nuestra bechamel de batata. Terminamos con una capa gruesa de nuestra «bechamel» y queso para gratinar. Horneamos unos 20 minutos y listo.